Dejamos
atrás el siglo XIX y entramos por fin en el XX. Reacia a presentar
la literatura como una vertiginosa sucesión de generaciones, y
convencida de que el punto de fuga de cuanto se escribe en el primer
tercio del siglo XX es la guerra civil española, ando dándole
vueltas a cómo articular este tramo final del curso. Del 98 al 36 el
hilo conductor será la poesía: el objetivo, un recital y una
antología comentada, en la que tendrán también cabida los y las
poetas posteriores (y no solo de nacionalidad española). Del 36 en adelante, la narrativa. Y si bien
constataremos que apenas hay novelista español contemporáneo que no
haya escrito su relato sobre la guerra civil – Manuel Rivas, Julio
Llamazares, Muñoz Molina, Almudena Grandes, Javier Cercas, Rafael
Chirbes y un larguísimo etcétera-, preferiremos centrarnos en lo
que escribieron quienes la vivieron, doblemente acallados por el
exilio y un ominoso silencio que llega hasta hoy, hasta los programas
escolares de este 2017: Sender, Max Aub, Arturo Barea, Chaves
Nogales.
¿Y
ellas?, nos preguntamos. ¿Y las mujeres? El lentísimo camino hacia
la igualdad de derechos, de emancipación respecto del padre o esposo,
de conquista del espacio público -la educación, el trabajo
remunerado, la participación en la vida política- se vio
brutalmente cercenado por la guerra y la dictadura. Curiosamente, es
esta una parte de nuestra historia apenas conocida por las
generaciones posteriores. Será ella, por tanto, la que nos sirva de
umbral para poner el pie en el siglo XX.
Hemos
arrancado esta tercera evaluación con el visionado en clase del
estupendo biopic -y relativamente desconocido- dedicado a Clara
Campoamor.