El proyecto que alberga esta página, pensado para 4º ESO, tiene la vocación de aglutinar los contenidos de la etapa de la ESO de Lengua y Literatura. Respetuoso -pese a nuestras muchas reservas- con el currículo, su objetivo último trata de superar el estudio analítico y yuxtapuesto de los aprendizajes del área, poniéndolos a funcionar en un solo proyecto.
La propuesta didáctica tiene como
objetivo final un proyecto (de investigación o de creación) cuya temática y
formato serán elegidos por cada estudiante. La elaboración del proyecto y la
secuenciación de los contenidos de la materia han quedado trenzados y
distribuidos en cuatro módulos de trabajo, que son los que conforman el
itinerario completo: ¿Qué proyecto tienes? ¿A quién lo diriges y con qué propósito? ¿En qué lenguaje y con qué formato? ¿Cómo lo vas a contar?
Cada uno de estos módulos hace hincapié en contenidos concretos del currículo que, a la vez que van contribuyendo a dar forma al proyecto final, se detienen en la reflexión en torno a aspectos y destrezas que entran en juego en el hecho comunicativo. Esta reflexión se lleva a cabo con actividades que permiten un abordaje en el aula en sesiones autónomas, lo que permite la adaptación de la propuesta a muy diferentes contextos escolares.
El curso fue pensado inicialmente para poder ser desarrollado con clases
presenciales y ratios reducidas, en cuyo caso el trabajo en equipo y
colaborativo, la discusión oral, la corrección entre pares, etc. serían
las formas habituales de llevarlo a cabo en el aula. Sin embargo, dadas
las características del mismo es también adecuado para su desarrollo online,
seleccionando en cada caso lo más pertinente y sin pretender ni agotar
sus propuestas ni que todos hagan lo mismo al mismo tiempo.
Ahora bien, no podemos silenciar un hecho: en vez de reducir las ratios, la administración educativa -la madrileña, en mi caso- ha optado por reducir a la mitad la presencia del alumnado en el centro. Seguiremos teniendo grupos de 30 estudiantes, el docente completará su jornada presencial en el centro, pero el alumnado recibirá la mitad de la atención educativa que requiere. La enseñanza semipresencial ha venido a ser, de hecho, una mutilación del dereho a la educación de chicos y chicas.
A pesar de todo, ánimo. Y salud.